jueves, 15 de septiembre de 2011

EL VELLOCINO DE ORO



¿Y de dónde salió el Vellocino de Oro?


La historia de Atamante


Normalmente se relaciona el Vellocino de Oro con la leyenda de Jasón y los Argonautas. Recuérdese la temeraria expedición de estos héroes en busca de este vellón que poseía poderes curativos sobrenaturales. El Vellocino de Oro también es sinónimo de algo que es muy bueno y que traerá grandes beneficios a quien lo tenga, pero ¿de dónde salió esta maravilla?, eso es un cuento mitológico poco conocido. Aquí les narro de dónde salió el famoso carnero cuya piel se convirtió en el objeto de la no menos famosa expedición argonáutica.
Existía en el Olimpo una muchacha llamada Néfele, que estaba sin oficio, sin marido, sin novio ni nada, ya que había sido creada por Zeus, de una nube a semejanza de Hera, la esposa del dios jefe, para engañar a Ixión, un tipo al que Zeus sospechaba que cortejaba a Hera. Resuelto el engaño, la utilidad de Néfele se redujo a cero. A Hera le dio lástima que esta muchacha estuviera por allí sin hacer nada y aburrida todo el tiempo. Así que le pidió a Atamante, rey de Beocia, hermano de Sísifo (el de la piedra) y Salmoneo, que se casara con Néfele. Como la muchacha era muy bella (no podía decir que no lo era ya que era exactamente igual a la esposa de Zeus), sin pensarlo mucho, con ella se casó.

Néfele, creada por Zeus de una nube a semejanza de Hera
Néfele le dio a Atamante dos hijos: Frixo y Leucón, además de una hija llamada Hele. Sin embargo, resulta que Néfele no le hacía mucho caso a Atamante, de manera que el aburrimiento seguía. Y como buen griego, él, ni corto ni perezoso, se buscó una noviecita ilegal: Ino, hija de Cadmo, el fundador de Tebas. Para evitar enfrentamientos, se la llevó para su palacio al pie del Monte Lafistio. Allí tuvieron dos hijos más: Learco y Melicertes.
Como entre cielo y tierra no hay nada escondido, Néfele se dio cuenta de los cuernos de su marido, y montando en cólera, fue a acusarlo ante Hera, a lo que esta le dijo a su protegida. "Amiga, no os preocupéis, que mi venganza sobre la Atamante y su casa caerá eternamente!".
Más calmada por la promesa de su protectora, fue hasta el palacio en el Monte Lafistio, y a viva voz le dijo a todos que Hera había dicho que Atamante debía morir. Pero nadie le hizo caso, por un lado los hombres le tenían más miedo a Atamante que a Néfele y por el otro, las mujeres querían mucho a Ino.
Sin embargo, aprovechando la popularidad que Ino tenía en Beocia, se le ocurrió un macabro plan. Pidió a los agricultores que sembaran semillas dañadas, de manera que al momento de la cosecha. Como ella sabía que Atamante creía mucho en el Oráculo de Delfos, supuso que enviaría hasta allá a unos sirvientes a pedir consejo y ella la les había podido que de regreso le dijeran que la única forma de que la cosecha fuera exitosa nuevamente es que Atamante ofreciera en sacrificio en la cima del Monte Lafisto a Frixo, el hijo que éste había tenido con Néfele.
Frixo era un guapo muchacho, del cual su tía Biadice, esposa de Creteo, se había enamorado, y se lo había hecho saber. Pero Frixo la desdeñaba, así que ella inventó una historia diciendo que él había tratado de violarla. Así Frixo se ganó el repudio de todos, y cuando se supo el resultado del falso oráculo, todos apoyaron el consejo de sacrificar al malvado Frixo.
Con mucho pesar, Atamante tomó a su hijo, lo llevó hasta la cima del Monte Lafisto, lo amarró a una gran piedra, tomó un puñal, alzó su brazo para dar el terrible golpe, cuando de una manera milagrosa, Heracles (otros dicen que Hermes) le agarró el brazo y le dijo: "Detente Atamante!, Zeus no desea sacrificios humanos", sin embargo, Atamante insistió y luchó para poder asestar la mortal puñalada contra su hijo. El forcejeo se hizo complicado y casi logra matar a Frixo si no es por que Hermes envía al rescate un carnero volador.
(Nefele se apareció en sueños a sus hijos y les anunció el vehículo para escapar de su suerte: el carnero Chrysomallos, otro de ilustre estirpe (en los mitos griegos ni los animales se resignan a ser un cualquiera). Chrysomallos era el hijo que Poseidón, dios del mar, convertido en carnero, había engendrado en la ninfa Teofane a la que había tenido la decencia de convertir en oveja y llevársela a una isla poblada de más ovejas, en lo que tiene que ser el harén más raro de la historia. De esos amores salió un carnero alado y con lana de oro, Chrysomallos, que de alguna manera acabó en manos de Apolo, que se lo regaló a Nefele.)
El propio animal le dice a Frixo: "Rápido, salta sobre mi lomo", el joven obedeció y ya comenzaba su huida cuando se escuchó un grito que decía "llévenme a mi también", era Hele, hermana de Frixo quien estaba allí presente. Se devolvieron y también ella subió al carnero volador. Tomaron el rumbo a la tierra de Colquis, donde Helios, el dios del Sol mantenía sus caballos. Pero en el camino, Hele se resbaló y calló en el estrecho que hoy separa (o une) al Mar Egeo del Mar de Mármara, quedando allí su cuerpo. Desde entonces el lugar se llamó "Helesponto" (Mar de Hele), hoy es el estrecho de los Dardanelos.
Frixo llegó sin más contratiempos a Colquis donde ofreció en sacrificio al carnero que lo había salvado (algo desagradecido, según mi gusto). Su vellón se convirtió en el famoso Vellocino de Oro de la historia de Jasón y los Argonautas.


¿Y qué pasó con Ino?
Asustados por el milagro en el Monte Lafistio, los mensajeros de Atamante confesaron que le habían dado un oráculo falso de Delfos, y así también se conocieron los engaños de Biadice. Néfele de todas maneras trató de matar a Atamante, quien se salvó gracias a la intervención de Heracles.
Y Hera brava con Atamante, no sólo por el engaño que le había hecho a Néfele, sino también porque Ino fue una de las nodrizas de Dionisos, hijo bastardo de Zeus de una de sus muchas noviecitas, Semele, quien para desgracia adicional era hermana de Ino, volvió loco al ya muy atribulado personaje. En su locura, Atamante creyendo ver un ciervo dijo "Hey, miren ese hermoso animal", tomó su arco y de un flechazo mató a lo que creía era una magnífica pieza de casa, cuando en realidad era su propio hijo Learco. Ino tomó a su otro hijo, Melicertes y por si acaso, huyó corriendo del lugar.
La tragedia no acaba aquí, Dionisos en venganza dejó ciego a Atamante, éste logró atrapar a Ino comenzó a azotarla creyendo que era una cabra, Ino logró escapar pero cayó al mar ahogándose junto a Melicertes. Zeus, dada la bondad que Ino había tenido con su hijo Dionisos, convirtió a Ino en la diosa Leucotea y a Melicertes en el dios Palemon.
Y para colmo, Atamante, salió de Beocia sin hijos, ya que el hijo que le quedaba, Leucón, murió de una enfermedad.
El final de la historia es que Atamante, habiendo ido nuevamente a consultar el oráculo de Delfos, supo que "Comerás de las bestias". Desconsolado, sin enteder el extraño oráculo, siguió camino al norte, se encontró con dos sobrinos: Haliarto y Conoreo, ya apunto de morir de habre en la desolada planicie de Tesalia, vieron una manada de lobos que se comían a un cordero, al acercarse, los lobos huyeron, se salvaron de morir de hambre porque los lobos habían dejado suficiente comida para ellos, y así comprendió el oráculo. Fundó allí la ciudad de Alos, se casó nuevamente con una muchacha llamada Temisto y de nuevo tuvo una familia.
Al menos para Atamante, quien había recuperado la cordura, la historia tuvo un final feliz.


Fuente: Germán Montero Alcalá
Maracaibo, Julio 2001
Basado en Greek Myths de Robert Graves
http://www.oocities.org

A manera de comentario

Me parece sospechosamente parecida la historia de Atamante sacrificando, por una supuesta orden de Zeus, a su hijo Frixo en la cima del monte Lafistio con la historia bíblica de Abraham y su hijo Isaac, a quien Dios le había ordenado sacrificar en la cima del Monte Moriah (Gen 22:3). Con la diferencia de que Atamante, a pesar de que el ángel (en este caso Heracles), le dijo que no tenía que hacerlo, Atamante insistió en matar a su hijo, mientras Abraham agradeció a Dios por detener el sacrificio. ¿Qué historia se habrá escrito primero?.


A manera de notas
1. En alguna parte leí que el carnero alado se llamaba Crisomalo.
2. Néfele o Nefele significa "nube" en griego.
3. Leucotea significa "diosa blanca", de leuco (blanco) y theos (dios).
4. Por si acaso, Heracles es el nombre griego de Hércules.
5. Jasón, el jefe de los argonautas, que después fue a buscar el Vellocino de Oro a Colquis, era primo de Frixo.

3 comentarios:

El Gaucho Santillán dijo...

Me encanta la historia.

Frixo, en realidad, mas que desagradecido, era bastante HDP.

Lo de la similitud de relatos, es muy comùn.

La epopeya de gilgamesh, es muy parecida al Gènesis.

Un abrazo.

Carrode Triunfo dijo...

Gracias por tus comentarios Gaucho
siempre tan justos y cultos
Un gran saludo
Carro de Triunfo

Carro de Triunfo dijo...

Laura buen trabajo fantástico y
muy didactico
El curso está dando sus frutos
Carro de Triunfo